Con gran alegría, la Diócesis de Escuintla, celebró la Consagración de la Imagen de la Inmaculada Concepción, patrona de esta diócesis y que la ha acompañado por varios siglos. Por más de cuatrocientos años, la devoción a la «Limpia y purísima concepción de María», ha acompañado a los escuintlecos por muchísimas generaciones.
Incluso dos siglos antes de que el Dogma proclamado por el Papa Pío IX, el 8 de diciembre de 1854, en la Bula Ineffabilis Deus, en Escuintla como en muchos lugares del mundo, la inmaculada concepción, ha sido uno de los misterios de nuestra fe, a la que tantos fieles católicos han venerado y querido desde siempre.
El día grande, en medio de la celebración del Tiempo de Adviento, se celebra el 8 de diciembre, donde la Iglesia, que es madre y maestra, nos presenta a la Virgen María, que desde su concepción, estuvo inmaculada a la espera de la venida de Cristo. Con este modelo tan maravilloso y esa guía, como la estrella en el firmamento, nos debe servir para guiar nuestros pasos y preparar el camino que nos ha de llevar a la Navidad.
Y por eso con gran algarabía, los fieles anuncian la fiesta a la voz de: «¿qué causa tanta alegría?, la Inmaculada Concepción de María», pues María es esa puerta hermosa, que nos trajo a Cristo y con Él, la salvación ¿Cómo no estar felices y celebrar tan hermosa advocación de la Virgen?
El 9 de diciembre de 2023, con la presencia del Excelentísimo y Reverendísimo Monseñor Francisco Montecillo Padilla, Nuncio Apostólico en Guatemala, quien tuvo a bien presidir la Santa Misa y llevar a cabo la coronación de la imagen de la Virgen, en un acto solemne, primeramente la Cofradía de la Inmaculada, solicitó al párroco de la Parroquia Nuestra Señora de Concepción, que iniciara los trámites correspondientes ante el obispo, después de varios meses, se determinó la fecha para la consagración y fue el obispo de Escuintla, Monseñor Víctor Hugo Palma, quien invitó al Nuncio Apostólico, para que con su presencia, como enviado de Su Santidad el papa Francisco, diera más realce y solemnidad a la consagración.
Se leyó la solicitud de consagración de la imagen y una breve reseña histórica. El obispo preguntó al párroco, si la imagen es venerada ampliamente por los fieles y éste respondiendo afirmativamente, agregó también que la devoción del pueblo escuintleco viene de varios siglos atrás y se ha mantenido firme, siendo la Inmaculada Concepción, un pilar dentro de la sociedad y fieles escuintlecos.
En la homilía, Monseñor Francisco Montecillo, recalcó cómo la Virgen María es modelo a seguir, porque ha estado siempre al servicio del Señor y cómo con toda confianza, podemos abocarnos a ella para pedir su santa intercesión y maternal cuidado. María es en todo sentido, el modelo del cristiano, el modelo a seguir y a quien podemos acudir siempre, ella es el camino más corto, rápido y seguro para llegar a Dios, a través de la Virgen María conocemos a Jesús.
Concluyendo la celebración eucarística, monseñor Víctor Hugo Palma, obispo de Escuintla, aprovechó para lanzar parte del Plan Pastoral «Rema mar adentro», en su tercera etapa, llamada «la repesca». Representantes de las parroquias que conforman la Diócesis de Escuintla, recibieron el signo de la repesca, una cartilla donde se explica la forma de llevar a cabo los cenáculos misioneros, los cuales una vez interrumpidos por la pandemia del Covid-19, nuevamente se están retomando e impulsando con más ahínco y energía.
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Las fotografías que se tomaron en la Celebración de la consagración de la imagen de la Inmaculada Concepción de María, se pueden descargar a continuación:
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