«…Al que sea ocasión de pecado para esta gente sencilla que cree en mi, más le valdría que le pusieran al cuello una de esas enormes piedras de molino y lo arrojaran al mar.
Si tu mano te es ocasión de pecado, córtatela; pues más te vale entrar manco en la vida eterna, que ir con tus dos manos al lugar de castigo, al fuego que no se apaga…»
Tu palabra Señor, es la verdad; santifícanos en la verdad. Aleluya, Aleluya, Aleluya.
Video de la Homilía de Monseñor Víctor Hugo Palma, Obispo de la Diócesis de Escuintla, para el XXVI Domingo del Tiempo Ordinario.