“Misericordia quiero y no sacrificio” (Mt 9,13)
Durante todo el año, las religiosas Misioneras de la Caridad, la congregación fundada por Santa Teresa de Calcuta, atiende a un buen número de ancianos, indigentes y enfermos de VIH, ofreciéndoles cuidados médicos, alimentación y ayuda espiritual, todo esto en la sede de la Misión en Escuintla, ubicada en la carretera de salida al occidente del país, cercano a la Comunidad San Luis.
El día de Navidad, junto a toda la Iglesia Universal, se celebró, como todos los años, de forma muy especial. Desde temprano, las hermanas y un grupo de laicos, se reunieron para organizar el área que sería utilizada para la celebración.
Cercano al mediodía, Monseñor Víctor Hugo Palma, Obispo de Escuintla, presidió la Santa Misa de Navidad y a continuación se realizó un almuerzo especial, donde no pudo faltar el tradicional tamal navideño y que los residentes de la casa hogar, que son atendidos por las Misioneras de la Caridad, agradecieron de forma especial.
El Obispo, religiosas y laicos que colaboraron en la organización y preparación de la actividad, compartieron, al finalizar, el almuerzo y que juntos reflexionaron sobre la Navidad. Fieles católicos de las comunidades San Luis, Catedral y del Albergue Papa Francisco, colaboraron aportando su granito de arena.
Las fotografías que se tomaron durante el almuerzo navideño en el asilo de las Misioneras de la Caridad, se pueden descargar a continuación:
Fotos del almuerzo navideño en el asilo de las Misioneras de la Caridad 2018
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